Sobre mis clases

Enseño inglés general del modo habitual y también pronunciación inglesa en un tipo de clase más específica. Y, por supuesto, ambas opciones pueden combinarse como se quiera (por ejemplo, una clase de inglés en la que se desarrollen todas las habilidades básicas, pero con un especial énfasis en corregir problemas de pronunciación).

Inglés general

En este tipo de clases enseño todas las destrezas básicas del inglés. Se trabaja la gramática, el vocabulario y la pronunciación de distintas formas, bien a través de ejercicios, conversación o lectura. También se hace hincapié en el listening, casi siempre a partir de fuentes de inglés real, es decir, no procedente de métodos ni grabaciones de laboratorios de idiomas (como puede deducirse del contenido de esta web, tengo miles de grabaciones de este tipo que se adaptan a distintos niveles). A aquellos alumnos que tengan tiempo y disponibilidad, se les darán ejercicios de writing para hacer en casa, pero esto no es obligatorio. Igualmente, podemos preparar cualquier tipo de examen (First, Advanced o Proficiency, etc.). En definitiva, lo que normalmente hago es adaptar las clases a las necesidades del alumno. Las condiciones son las mismas expuestas abajo en el apartado de clases de pronunciación.

Pronunciación

Clases individuales

  • Lugar: mi propia casa en el barrio de Argüelles, Madrid, o a través de skype.
  • Duración de la clase: Se ajusta a las necesidades del alumno. En principio, una hora u hora y media.
  • Nivel requerido: cualquier nivel. Desde principiante absoluto hasta profesores de inglés.
  • Precio: Depende de la duración y la frecuencia de las clases, contactar conmigo aquí.
  • Entre clases: al alumno se le dan deberes, si bien en una cantidad acorde con su disponibilidad. Puede contactar conmigo por correo electrónico para resolver dudas. También me puede enviar grabaciones con los ejercicios de la semana, que serán comentadas o bien por correo electrónico o en la siguiente clase.
  • ¿Durante cuánto tiempo hay que recibir estas clases? El programa completo se cubre en aproximadamente un año académico, que a grandes rasgos se divide dos partes:
    • 1ª Parte (3-4 meses). En este período se estudian y se practican en profundidad todos los sonidos del inglés, siempre comparándolos con los sonidos equivalentes del español, y se corrige una lista básica de errores típicos cometidos por hispanohablantes al hablar inglés.
    • 2ª Parte (3-4 meses). Se refuerza todo el material estudiado en la primera parte y se abordan los cambios que se producen en los sonidos al juntarlos unos con otros (connected speech), el ritmo y la entonación. Todo ello con el objetivo de mejorar la fluidez y la naturalidad.
  • ¿A quién van dirigidas estas clases? A cualquier persona que, por el motivo que sea, desee mejorar su pronunciación en inglés (profesores que tienen que enseñar en inglés, trabajadores que deben comunicarse en inglés, cualquier tipo de profesional que viaje al extranjero o hable con colegas extranjeros y quiera expresarse con mayor fluidez y confianza).
  • ¿Qué se consigue con estas clases? Los Nueve Objetivos para la Clase de Pronunciación se explican más abajo.

Talleres

Los talleres pueden diseñarse en función de las necesidades del cliente. Esta es la información básica.

  • Lugar: El lugar de trabajo del grupo de alumnos o mi propia aula en el centro de Madrid.
  • Número de estudiantes: Entre 4 y 6.
  • Duración. Hay dos módulos distintos.
    • Taller de iniciación. Seis horas de clase divididas en dos o tres días. Se comparan todos los sonidos del inglés con los del español para que los alumnos vean las diferencias entre ellos y sepan cuál es la vía para resolver los problemas de pronunciación.
    • Taller estándar. 24 horas de clase (2 clases semanales de una hora y media o dos horas; un mes y medio o dos).
      • Nivel 1. Los sonidos del inglés y el español comparados. Catálogo básico de errores de pronunciación de hispanohablantes.
      • Nivel 2. Refuerzo de lo estudiado en el Nivel 1 + cambios que se producen en los sonidos al hablar (connected speech). Segundo catálogo de erros típicos de hispanohablantes. Mejora de la fluidez.
      • Nivel 3. Refuerzo de lo estudiado en los niveles 1 y 2 + acento, ritmo y entonación. Se siguen trabajando la fluidez y la naturalidad.
  • Nivel requerido: Intermedio-avanzado.
  • Precios:
    • Taller de iniciación: 75 € / alumno.
    • Taller estándar: 200 € / alumno.
  • Entre clases: a los alumnos se les dan deberes, si bien en una cantidad acorde con su disponibilidad. Pueden contactar conmigo por correo electrónico para resolver dudas. También me pueden enviar grabaciones con los ejercicios de la semana, que serán comentadas o bien por correo electrónico o en la siguiente clase.
  • ¿A quién van dirigidas estas clases? A cualquier persona que, por el motivo que sea, desde mejorar su pronunciación en inglés (profesores que tienen que enseñar en inglés, trabajadores que deben comunicarse en inglés, cualquier tipo de profesional que viaje al extranjero o hable con colegas extranjeros y quiera expresarse con mayor fluidez y confianza).
  • ¿Qué se consigue con estas clases? Los Nueve Objetivos para la Clase de Pronunciación se explican más abajo.

Nueve Objetivos para la clase de pronunciación inglesa

 

  1. Hazte entender. Los hispanohablantes tenemos a menudo problemas para hacernos comprender en inglés, tanto cuando hablamos con anglosajones nativos como con personas de otras procedencias, porque nuestro sistema fonológico y el inglés son muy distintos. En mis clases explico el modo en que se producen los sonidos en ambas lenguas. Los comparamos en profundidad y analizamos las similitudes y diferencias, lo cual permite al alumno corregir errores en la articulación de los fonemas y mejorar su expresión oral. El resultado es que su interlocutor, con independencia de cuál sea su lengua de origen, le entiende mejor porque el inglés que escucha es mucho más real. El hablante se expresa ahora en una lengua mucho más próxima al inglés estándar que se habla y entiende en el mundo.
  2. Mejora tu comprensión del inglés. La mejora en la expresión oral corre paralela al avance en la comprensión de lo que se escucha porque el alumno empieza a distinguir palabras y frases en lo que antes no era más que una masa informe de sonidos. Para lograr este objetivo es crucial el trabajo que hacemos con el connected speech, que es como se conoce el proceso por el cual las palabras y los sonidos cambian cuando se articulan unos detrás de otros en el habla. Esta es una de las tareas más útiles, apasionantes y exigentes para un hablante no nativo.
  3. Acaba con los típicos errores de hispanohablante. Hay un largo catálogo de errores habitualmente cometidos por hispanohablantes que es imprescindible abordar. En clase los analizamos todos con dos objetivos:
    1. Comprender de dónde proceden. Por lo general son el resultado de la interferencia de un rasgo fonético del español. Esta falta de correspondencia entre el inglés y el español se explica en términos fáciles y comprensibles.
    2. Asegurarnos de que los alumnos sepan cómo tienen que modificar ese rasgo para superar la dificultad.
  4. Acaba con tus propios errores, esos que llevas cometiendo toda la vida. Hay también problemas de pronunciación que son característicos de cada hablante concreto y deben ser tratados de forma personal. Gran parte de ellos son errores simples y obvios que a lo largo de los años se han fosilizado porque nadie le ha dicho al alumno cómo debe resolverlos. La forma de abordar estos casos es totalmente individualizada. Los alumnos reciben instrucciones técnicas, claras, precisas y fiables, muy alejadas de la práctica habitual, que consiste simplemente en imitar al profesor.
  5. Aprende a resolver problemas de pronunciación de forma autónoma. Desde el primer día los estudiantes aprenden un método que les permitirá abordar y resolver cualquier tipo de problema de pronunciación que puedan encontrarse en el futuro. Esta es una herramienta de extraordinaria utilidad y efectividad, porque en poco tiempo permite al alumno manejarse con independencia. Y lo bueno es que, además, se aprende una vez y dura para siempre. Es como montar en bicicleta. Nunca se olvida.
  6. Pronuncia correctamente el vocabulario de tu campo profesional. La autonomía al abordar todo tipo de problemas de pronunciación permite a los alumnos ser muy precisos cuando se trata de utilizar términos específicos de su campo profesional, cualquiera que este sea. Este tipo de vocabulario puede resultar muy difícil por diversas razones (a veces solo se ve escrito, no se encuentra en los diccionarios habituales, tiene una ortografía complicada, etc.). La capacidad de encontrar fácilmente la pronunciación correcta de todos esos términos revierte en una mejora de la competencia profesional cuando el idioma en el que esa profesión se ejerce es el inglés.
  7. Pon tu inglés a su verdadero nivel. Concentrarse durante una breve temporada en la corrección de los problemas básicos de pronunciación tiene un efecto sorprendente: el nivel de inglés del alumno mejora de forma de forma exponencial y con inusitada rapidez. Pero esto no ocurre por arte de magia, sino todo lo contrario. Es completamente lógico. Por lo general, la pronunciación es la habilidad más descuidada en las clases de inglés (fundamentalmente porque no se sabe como enseñarla de forma clara). El resultado es que muchos alumnos tienen un gran conocimiento de gramática y un buen vocabulario, pero una mala pronunciación que entorpece sus habilidades comunicativas. Por el procedimiento de superar todos estos obstáculos, conseguimos un hablante de inglés más equilibrado. Alguien que es capaz de demostrar lo que realmente sabe.
  8. Mejora tu imagen como hablante de inglés. Una buena pronunciación reporta enormes beneficios en cuanto a la imagen que transmitimos a los demás. Hoy en día, esto es extremadamente importante puesto que el número de personas a las que se les exige el uso del inglés en su área profesional es cada vez mayor. Por eso, quien es capaz de expresarse en inglés sin esfuerzo, con buen acento y una entonación natural juega con ventaja con respecto a aquellos que ven su mensaje devaluado por incontables fallos en la pronunciación. Una pronunciación descuidada puede señalarte como hablante descuidado (o incluso peor, como trabajador poco diligente) y transmitir falsas ideas, como que tus capacidades son menores de lo que en realidad son o que tienes escasas habilidades comunicativas. Por suerte, la pronunciación se corrige de forma rápida y efectiva con el enfoque adecuado.
  9. Mejora tu confianza. El resultado final de todo este trabajo se traduce en lo que seguramente constituye el mayor beneficio: el alumno gana en confianza, seguridad en sí mismo y tranquilidad. Pero, una vez más, esta agradable sensación de control no se basa en ninguna fantasía ni en ilusiones, sino que es el resultado de un conocimiento nuevo y sólido (adquirido con un cierto esfuerzo, sí, pero mucho menor de lo que podría imaginarse). Ahora, al expresarse en inglés, el hablante sabe que su discurso será impecable porque la pronunciación –esa área de la lengua que una vez fue la más abstrusa y la más temida- ya no guarda para él ningún secreto.