/t/ → /ʧ/

Este es un caso muy interesante en el que interviene el sonido /j/. La alveolar /t/ seguido de la palatal /j/ se convierte en la post-alveolar /tʃ/. Por tanto, el punto de articulación del sonido resultante no es ni el del primer fonema ni el del segundo: es un tercero. El modo de articulación también cambia ligeramente: pasa de ser oclusiva a africada (como sabes, las africadas comienzan como oclusivas y continúan como fricativas). Este tipo de asimilación se llama coalescence (el verbo coalesce significa unirse, fusionarse, etc.) porque dos sonidos se fusionan en un nuevo fonema en un punto de articulación que no corresponde exactamente a ninguno de los dos originales. Hablamos de coalescence o de yod coalescence (yod es el nombre que recibe el sonido /j/ en el alfabeto hebreo) cuando el proceso de asimilación implica el fonema /j/ (veremos cuatro casos diferentes).

 

Por tanto:

/t/ (seguida de /j/) se convierte en /tʃ/

 Didn’t you know? |ˈdɪdn tʃu ˈnəʊ|

 I’ll meet you there. |aɪl ˈmiː tʃu ˈðeə|

 

Escucha estas dos primeras grabaciones. Me gustaría subrayar que esto no procede de un grupo de amigos tomando algo en un pub, sino de uno de los ejemplos más perfectos de inglés estándar y bien articulado: un boletín de noticias de la BBC.

 Bands and orchestras have faced soaring costs and complicated bureaucracy since the UK left the EU last year (BBC News bulletin). |ˈlɑːst ˈjɪə| → |ˈlɑːs ˈtʃɪə|

 The European hub for development of laser weapons is expected to open in the United Kingdom next year (BBC News bulletin). |ˈnekst ˈjɪə| → |ˈneks ˈtʃɪə|

 

Y aquí hay otros ejemplos del mismo tipo:

 Tell me what you mean by this (Laurie Taylor, BBC4). |wɒt ju ˈmiːn| → |wɒ tʃu ˈmiːn|

 Josh Surtees is a journalist who writes for The Guardian and lives in Trinidad and Tobago. Last year he received an email from our Middle East correspondent, Bethan McKernan (podcast from The Guardian).

 What is needed, though, is that you understand the mental demands of those sports and are able to adapt your work, so that it can be integrated into the performance environment. But if you’re not honest to your clients about what you realistically can and can’t do, you won’t progress very far (from a Cambridge Advanced test).

 

Un hecho muy importante es que este proceso, con bastante frecuencia, ocurre dentro de una sola palabra:

 He was paraded in the École normale, in the École militaire, in the huge courtyard, and he was stripped, ceremonially, stripped of all his epaulettes and decoration and his sword was broken in front of him and he was sent off to, as you said, Devil’s Island (Robert Gildea, BBC4). /ˈkɔːtjɑːd/ → /ˈkɔːtʃɑːd/

 In this period, the papal incomes shifted rather from being mainly derived from spiritual incomes (Catherine Fletcher, BBC4). /ˈspɪrɪtjuəl/ → /ˈspɪrɪtʃuəl/ In this case, the assimilated version is, of course, the most common one.

  That tune is just sublime. Even the viola gets a go at it (Georgia Mann, BBC4).

 

En algunas palabras, el sonido /tʃ/, derivado históricamente de /t/ + /j/, se ha convertido en la única posibilidad. Esto ocurre, por ejemplo, con la palabra nature:

   /ˈneɪtʃə/

 

Escuchemos ahora la pronunciación de nature y perpetual en esta grabación:

 In the Book of Genesis, nature was the paradise of Eden, but for the philosopher Thomas Hobbes it was a place of perpetual war (Melvyn Bragg, BBC4).

Nature se pronuncia siempre /ˈneɪtʃə/. Perpetual se pronuncia casi siempre /pəˈpetʃuəl/. La pronunciación /pəˈpetjuəl/ es posible, pero hoy en día no tan común.